Mendoza forma parte de la prestigiosa red global de las Great Wine Capitals, por lo que es reconocida como uno de los principales centros vitivinícolas del mundo junto a regiones como Burdeos, La Rioja, Napa Valley, Casablanca o Verona, entre otras.
Enmarcadas por la belleza de los viñedos, las bodegas mendocinas abren sus puertas con degustaciones, almuerzos, arte y cultura, paseos en bicicleta, clases de cocina, cabalgatas entre viñedos, y hasta la posibilidad de podar o cosechar, de involucrarse en el apasionante proceso. Alojamientos en posadas y spas temáticos completan el abanico de opciones para vivir una experiencia única en un paisaje sin igual.