Mendoza, conocida por sus paisajes majestuosos, sus vinos de renombre y la imponente cordillera de los Andes, incorpora una propuesta turística innovadora. Vuelos de bautismo en helicóptero, que permiten que mendocinos y turistas puedan sobrevolar el dique Potrerillos y contemplar la provincia desde una perspectiva inigualable.
Esta experiencia brinda la posibilidad de recorrer uno de los espejos de agua más emblemáticos de la región, rodeado de montañas y naturaleza pura. Con capacidad para tres pasajeros, cada vuelo ofrece un momento exclusivo, ideal para quienes buscan sumar adrenalina y asombro a su estadía.
Alejandro van Ditmar, creador de HelicopTour, comentó que su pasión es la aviación y que ante la pregunta de su hijo Félix de “¿qué pasa si podemos mostrarle a la gente esto lindo que hacemos con lo lindo y manso que es Mendoza?”, nacieron estas experiencias.
“Potrerillos es el lugar ideal para volar en helicóptero. Entonces, hacemos un recorrido sobre el lago, entre montañas. Mansa experiencia”, agrega Alejandro.
Con base estratégica en el dique Potrerillos, a menos de una hora de la Ciudad de Mendoza, se presenta como la opción perfecta para escapadas de fin de semana, celebraciones especiales o para quienes desean vivir algo diferente.
Con un valor de $88.000 por persona, HelicopTour garantiza un viaje seguro, ágil y de primer nivel, gracias a la amplia experiencia de sus pilotos, asegurando que cada pasajero disfrute de la aventura con total confianza y confort.
Con esta propuesta, Mendoza amplía su oferta turística con un atractivo de nivel internacional que combina paisajes, emoción y exclusividad en un solo vuelo.
Una postal de Mendoza
La presa y embalse Potrerillos están ubicados sobre el río Mendoza, rodeado por las imponentes montañas mendocinas. Su construcción comenzó en 1999, para controlar el flujo de agua y producir energía eléctrica y agua para riego.
La presa se inauguró y comenzó a llenarse en 2001 y la usina hidroeléctrica fue inaugurada en 2003. Se encuentra a una altitud de 1380 m s.n.m., extendiéndose por una superficie de 900 hectáreas.
Inaugurado después de 20 años de espera, el Túnel Cacheuta-Potrerillos es una joya arquitectónica que permite vivir una experiencia única. Este túnel, considerado un hito en la infraestructura vial de la zona, conecta dos valles y ofrece vistas panorámicas impresionantes.
