Cada pieza es elaborada íntegramente a mano, desde la preparación de la pasta hasta el horneado a leña, lo que le otorga un carácter único.
Además del trabajo con barro, en el taller se desarrollan actividades vinculadas a la vida en finca, como el cultivo, la apicultura y la elaboración de conservas, generando una experiencia integral en contacto con los saberes y ritmos del campo.